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Dadme una Gerencia, y verás lo que puedo hacer

Durante los últimos 10 años me he dedicado a desarrollar y coachear a gerentes recién ascendidos, ayudándolos a consolidar sus competencias iniciales. Sin embargo, constantemente encuentro al comenzar un proceso, que gran parte de ellos poseen un común denominador que he llamado el “Síndrome del todo poderoso”.

Lamentablemente estos nuevos “Líderes gerenciales”, inician su viaje de manera optimista, pensando que el camino siempre será plano y que cualquier dificultad que surja con tan sólo ordenar, repetir, o gritar su deseo, la piedra (el problema) del camino será desplazada; pero para su mala fortuna poco hay de cierto en tal creencia.

Pero en dónde radica el problema; lo primero que he notado es que no saben cuál es el nivel de liderazgo con el que inician. Es por ello, que es importante hacerlos conscientes sobre lo que es la escalera del liderazgo y que ellos en ese momento se encuentran en el peldaño más bajo, denominado Liderazgo por posición; en el que posterior a su nombramiento, al equipo no le resta más que “obedecer”.

Curiosamente algunos de ellos aseguran que con cursar y aprobar un diplomado en liderazgo de cualquier institución reconocida, su gestión se transformará en algo muy exitoso. Quienes se han limitado a este “atajo”, lamentablemente han mostrado un desgaste mayor en el corto plazo y otros son incentivados para abortar la misión gerencial.

Es por ello que quiero compartir contigo las siguientes 5 recomendaciones; ya sea que estés iniciando como gerente o te encuentres en un plan de desarrollo, puedas entrar con mayor efectividad para lograr disfrutar la magia de gestionar equipos:

  1. Al iniciar como gerente, estos son los cuatro pilares que engloban el para qué te nombraron: Tomar decisiones, Desarrollar gente, Resolver problemas y Dar resultados. Siempre sugiero que los Skills que trabajes se enfoquen en estos cuatro pilares.

  2. Crea tu propia Visión; he comprobado que aquellos nuevos gerentes que estructuran y escriben su visión y sobre todo la comparten con su equipo, dan un gran paso para los cimientos de su liderazgo. La visión la defino, como la forma en que tú junto con tu equipo, quieren ser percibidos en el futuro dentro de la organización.

  3. Al entrevistarte con cada miembro de tu equipo, míralo y trátalo con un valor de 10, esto les hará sentir que tienes la confianza y que para ti es importante tanto su trabajo como su experiencia.

  4. Para desarrollar tu liderazgo, no te limites a tan sólo tomar cursos o leer libros sobre este tema; genera un inventario de tu equipo sobre lo que les apasiona, lo que hacen bien, cuales son sus metas y sus inquietudes, te aseguro que no hay nada más poderoso para influir en tu equipo, que cuando sienten que te preocupas desde el inicio por su desarrollo y sus resultados. Recuerda que antes de que obtengas sus mentes es importante ganarte su corazón.

  5. Para que puedas ir estableciendo los cimientos de tu equipo de alto desempeño, no intentes en convertirlos en tus cloncitos, los equipos de alto desempeño se caracterizan por sinergizar sus talentos y habilidades; por lo tanto, concéntrate en encontrar cuál es el talento y fortaleza de cada integrante de tu equipo y pon en marcha junto con ellos, proyectos colaborativos.

Espero de todo corazón, que estos puntos que ya han sido utilizados por otros líderes efectivos, también puedan funcionar en tu gestión gerencial. ¡Éxito!

*Las opiniones plasmadas son propias del autor y no de su empleador.*

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